10 cosas que aprendimos con César Suárez
César Suárez, periodista cultural, redactor jefe de TELVA y escritor acaba de publicar El enigma Paco de Lucía (Lumen). César traza un fiel retrato profesional y personal, en esta biografía construida a partir de conversaciones con quienes mejor conocieron al prodigioso guitarrista. De su mano, intentamos descifrar la personalidad, la revolución, la enorme influencia, de uno de los músicos españoles más universales.
1/
2/
Una pasión heredada
«Mi abuelo escuchaba flamenco en un radio casette que uno de mis tíos le había apañado. Hacía compás y pegaba al brazo del sillón donde estaba sentado. Yo me decía: «¿Qué hace este hombre callado dando golpes escuchando a gente que pega gritos?». Él se molestaba mucho cuando le interrumpías… Son esas vivencias que tienes de niño, que no parecen trascendentes y sí que lo son. Con el tiempo me di cuenta de que ahí empezó todo».
3/
4/
5/
El flamenco, un género cinematográfico
«Quizá es difícil acercarse al flamenco, pero es un mundo con unas vidas humanas alucinantes, unos territorios, un contexto histórico, unas vivencias, unas anécdotas increíbles… Podría ser un género cinematográfico, o lo que quieras. Para empezar, yo pensaba: ¿quién es esta gente que elige un nombre que ponerse como si fueran personajes?».
6/
«Paco era un angustias»
7/
El aura de Paco y Camarón
«Paco y Camarón se adoraban. Se percibe en sus grabaciones, en cómo se miraban… En el flamenco es muy bonito fijarte en los gestos entre cantaor y guitarrista, es una relación en la que hay que tener una sintonía que va más allá de la música. Hay que apreciar los silencios y los gestos del de al lado, si necesita más aire y tienes que alargar tu falseta… En las grandes parejas como Paco y Camarón hay un aura, una magia muy especial».
8/
«Si su padre hubiera sido mecánico, él hubiera sigo mecánico».
«Su gran amigo Manolo Nieto siempre decía de Paco que tenia una habilidad superior para aprender cualquier cosa. Solía decir que si su padre, don Antonio, hubiera sido mecánico, Paco hubiera sido un gran mecánico. Cuando le contabas algo, se interesaba de tal manera que te atravesaba con su mirada y con esa capacidad de absorber conocimiento».
9/
10/
Gracias a Hotel Sardinero por hacernos sentir como en casa y a Alhambra Reserva 1925 por multiplicar el disfrute.
Comparte este evento:
¿Quieres ver más Cooltural Plans?